20.7.16

Así es cómo el calor extremo está afectando a la economía mundial



El calor que pasas en la oficina está afectando al Producto Interior Bruto de tu país
En nuestro planeta cada vez hace más calor. El cambio climático está provocando que las temperaturas mundiales alcancen niveles cada vez más altas y que el excesivo calor afecte a nuestras vidas mucho más de lo que pensamos. Según un estudio publicado este lunes por las Naciones Unidas, el aumento de temperaturas y el calor están haciendo que la productividad baje y se produzcan pérdidas económicas en numerosos países.

El estudio investiga cómo el calor extremo en algunos países evita que los trabajadores trabajen en las horas más calientes del día. La gente se cansa más rápido y produce menos conforme aumenta el calor. Y ese tiempo de trabajo perdido golpea duramente el producto interior bruto de muchos países del mundo. En concreto, los costes globales del excesivo calor podrían llegar a sobrepasar los 2 billones de dólares en 2030.

“Cuando sufrimos un calor excesivo no podemos mantener la misma intensidad de trabajo, por lo que vamos a ver reducida la velocidad y aumentará la necesidad de descanso, sobre todo en las industrias intensivas”, explicó Tord Kjellstrom, director del Health and Environment International Trust y coautor del estudio.

Según un estudio publicado este lunes por las Naciones Unidas, el aumento de temperaturas y el calor están provocando que la productividad baje y se produzcan pérdidas económicas en numerosos países
Los investigadores descubrieron que, desde 1990, han aumentado las horas de trabajo perdidas en decenas de países. Además, estiman que si el planeta sigue calentándose, la tendencia aumentará. Por ejemplo, países como India, Vietnam e Indonesia podrían duplicar el número de horas de trabajo perdidas en el año 2055 y triplicar en 2085.

Por otra parte, el estudio explica que es más probable que el estrés por calor XXX restrinja trabajos mal pagados y de baja cualificación, como el trabajo pesado, la agricultura y la manufactura. Esta situación puede aumentar potencialmente la brecha entre ricos y pobres. Los países de bajos y medianos ingresos son más propensos a perder productividad por el calor, a pesar de que contribuyen menos a las causas del cambio climático. Por su parte, los países más ricos van a evitar en gran medida las pérdidas por el calor, explica la investigación.
Los países de bajos y medianos ingresos son más propensos a perder productividad por el calor, a pesar de que contribuyen menos a las causas del cambio climático

El aumento de las temperaturas no solo afecta a la economía global. También a la salud y el bolsillo de los trabajadores. “El trabajador se enfrenta a la pérdida de ingresos cuando ha producido menos en el mismo periodo de tiempo, o a una pérdida de tiempo de ocio y familia si se requiere más trabajo”, escriben los autores del estudio. También insisten en que la salud de los niños, mujeres y personas de edad avanzada tienen que hacer frente a más riesgos cuando se reducen los ingresos familiares.

Además, el gasto energético también es mayor. La demanda de aire acondicionado en oficinas, centros comerciales y hogares se dispara cuando aumenta la temperatura y es una carga más para las fuentes de alimentación, explica el estudio. Por ejemplo, una ciudad del tamaño de Bangkok puede requerir hasta 2 gigavatios de energía por cada aumento de 1 grado centígrado en la temperatura.
Los autores del estudio creen que si los países cumplen con las reducciones de CO2 y gases de efecto invernadero acordadas en la cumbre del Clima del año pasado en París, se podría reducir los efectos del cambio climático. 
Mientras tanto, seguiremos derritiéndonos en la oficina.