COMUNICADO
En busca de aclarar alegaciones falsas y distorsionadas que se han hecho en contra de nuestra institución y personal médico a través de medios de comunicación de dudosa credibilidad y redes sociales, Clínica Canela insiste en presentar su posición en torno al conflicto generado por el caso del paciente Alejandro Debilis Vázquez.
El día 20 de mayo el paciente estuvo involucrado en un aparatoso accidente de tránsito cuando su motocicleta impactó de frente a otro vehículo, lo cual le generó traumas craneales y lesiones de gravedad. El paciente fue llevado de emergencia al Hospital Público Dr. Musa de San Pedro de Macorís donde le fueron prestados los primeros servicios y donde fue diagnosticado con trauma craneocefálico moderado abierto, es decir, un trauma significativo en el cráneo.
Al hospital no contar con la especialidad necesaria para tratar dicho trauma, el paciente fue referido a otro centro. Ante dicho referimiento, el paciente no fue aceptado por dicho centro por los que los familiares procedieron a traer el paciente por su propia voluntad a Clínica Canela.
Al recibir un paciente, el protocolo de nuestra institución es exigir un depósito a pacientes particulares (sin seguro médico) de acuerdo a la gravedad de caso, precisamente para evitar situaciones como la que se ha presentado actualmente. Los familiares del paciente en cuestión no contaban con dichos fondos al momento de la admisión, pero el mismo fue admitido bajo la responsabilidad y consideración del Dr. Rodolfo Yan debido a su delicada situación, con la condición de que dicho depósito sería realizado al día siguiente, lo cual fue cumplido por los familiares.
El paciente fue trasladado a nuestra Unidad de Cuidados Intensivos donde el médico intensivista recibe el paciente consciente, pero agitado y desorientado, por lo que se procede a sedar el paciente y se conecta a ventilación mecánica. Ante tan delicada situación, el médico explica claramente la condición del paciente a la Sra. Rosa Julia Marte y le informa que el paciente presenta un pronóstico médico reservado, es decir, una condición de sumo cuidado donde se puede presentar cualquier tipo de complicación.
El día 23 le fue realizada un toracotomía (tubo de pecho) por un neumotórax y su dificultad respiratoria. Es necesario aclarar que desde su ingreso, el paciente ha estado bajo ventilación mecánica, presentando un alto consumo diario de oxígeno.
El paciente permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos hasta el día 25, cuando presenta una mejoría de su diagnóstico inicial. El paciente presentaba movimiento de sus extremidades, lenguaje coherente y consciente, por lo cual se traslada a sala de habitación con sus familiares y le es removida la respiración mecánica. El paciente empieza a tolerar alimentación oral y se le indica una dieta suave.
Según los familiares, el día 27 de mayo a las tres de la madrugada el paciente presenta dificultades respiratorias y secreciones orales, y luego del examen médico se determina una saturación de oxígeno en 93%, una tensión arterial en 130/80, frecuencia cardíaca en 145 latidos por minuto y una frecuencia respiratoria en 24 respiraciones por minuto. El especialista indica medicar al paciente, pero el mismo no presenta mejoría y presenta una disminución de oxígeno progresiva hasta un 50%.
Ante tal deterioro de su situación de salud, el paciente es trasladado nueva vez en presencia de sus familiares a la Unidad de Cuidados Intensivos a las 4:15 AM donde se le es conectada la respiración mecánica. Ante la nueva eventualidad, se le explica a los familiares el incremento de su factura, a lo cual ellos accedieron y se mostraron dispuestos a pagar la misma con tal de mantener al paciente con los mejores cuidados.
El mismo día a las tres de la tarde, el Dr. Rodolfo Yan indica a los familiares que el paciente está en una situación sumamente crítica con muerte cerebral, pero presentando signos vitales, tensión arterial 83/37 y frecuencia cardiaca de 144 latidos por minuto donde la posibilidades de sobrevivir eran muy bajas. A pesar del diagnóstico critico presentado por el Dr. Yan, los familiares accedieron a mantener el paciente en la Unidad de Cuidados Intensivos.
El día 28 los familiares le solicitan al doctor que el paciente sea desconectado, a lo cual el doctor le responde que él como médico no puede hacerlo ya que va en contra de su criterio y ética como profesional. El padre del paciente procede a retirar el suministro de oxígeno a las 2:00 PM en presencia de testigos y cámaras fotográficas con el paciente todavía presentando signos vitales. El paciente fue declarado muerto a las 2:15 PM.
Al momento de presentar la cuenta a los familiares, estos se negaron rotundamente a pagar alegando que los montos eran demasiado elevados, por lo cual la Administración procedió a detallarle y explicarle los gastos incurridos.
Luego de una revisión, la familia del paciente todavía se mostraba indispuesta a colaborar con nosotros a pesar que le hicimos una oferta de abonar RD$160,000 como adelanto y un plan de pago para los RD$126,000 restantes para luego cambiar su parecer y alegar que simple y llanamente no contaban con el dinero. Ante tan complicada situación, procedimos a hacerle otra oferta que consistía en abonar RD$50,000 y pagar el monto restante en un plan de pago a través de una firma de un acuerdo legal; al día de hoy todavía restan RD$206,076.13 por saldar
Esta oferta también fue rechazada y combatida por la familia que procedió a convocar una manifestación agresiva con decenas de personas para protestar esta decisión y amenazar a todo el personal de nuestra institución, y al mismo tiempo incitando a los familiares a que no firmaran dicho acuerdo de pago.
Sírvase notar, que el médico de cabecera, Dr. Rodolfo Yan decidió no cobrar sus honorarios en solidaridad con la familia y la situación en la que se encontraba. Dicha decisión fue tomada para que un acuerdo fuera llevado a cabo entre ambas partes lo antes posible.
Nuestra institución tiene más de 50 años ofreciendo servicios de medicina privada en la región, en los cuales se ha ganado el respeto y confianza de toda la Región Este a través de un servicio de calidad y un trato humano.
Reconocemos que ante la pérdida de un ser querido las personas puedan actuar de forma incorrecta por la situación. en la que se encuentra. Sin embargo, esto no le da derecho a nadie de acudir a la difamación de una institución privada que siempre vela por los intereses y el bienestar de su comunidad por encima de cualquier interés económico.
Es de nuestro interés actuar con transparencia ante situaciones como esta para mantener nuestra credibilidad como institución. La intención de Clínica Canela en todo momento fue de mantener a los familiares del paciente al tanto de su evolución médica y gastos clínicos para precisamente evitar la situación en la que hoy nos hemos visto envueltos.
Tomado del Facebok de Clinicas Canela