23.11.17

Cómo es la braguita reutilizable de estilo brasileño para la menstruación


Tres estudiantes brasileñas crearon su propia empresa para satisfacer un hueco en el mercado: la ropa interior para la menstruación reutilizable, pero 'a la brasileña'.
Raíssa Kist, de 23 años, Francieli Bittencourt y Nicole Zagonel, de 25, han diseñado y producido íntegramente en Brasil una prenda íntima que absorbe la menstruación.
Dispone de tres tejidos con propiedades antibacterianas e impermeables. La última capa es de algodón.
El producto, en su versión más básica no es nuevo, pero ellas han sabido adaptarlo a un mercado muy específico que tiene incluso hasta su propio corte en ropa interior y de baño: el brasileño.
La empresa Herself se empezó a forjar a fines de 2016, pero el impulso final llegó cuando hace unos meses la campaña de crowdfunding que lanzaron por internet superó con creces el objetivo de dinero a recaudar.

Todo empezó cuando Kist y Zagonel, estudiantes de ingeniería química en la Universidad Federal do Rio Grande do Sul (UFRGS), participaban en un curso de formación sobre negocios socioambientales y buscaban soluciones que redujesen el uso de productos descartables en el mercado de cosméticos.Conociendo la existencia de un modelo de ropa interior femenino importado de Estados Unidos, comenzaron a investigar.
"Entramos en contacto con algunas mujeres para entender las situaciones incómodas por las que pasan cuando tienen el período y entendimos que muchas no estaban satisfechas con algunos de los métodos así que por comodidad o falta de opciones acababan recurriendo a los tradicionales de usar y tirar", contó Kist a BBC Brasil.
Además, enviaron prototipos de sus prendas y cuestionarios para conocer las opiniones de las usuarias.
"La gente nos habló de cosas como alergias, calor y rozaduras. Los cuestionarios nos dieron la oportunidad de aprender mucho", recuerda la universitaria.
Otro de los motivos de estas tres estudiantes para lanzarse a esta aventura fue que muchas mujeres expresaron lo difícil que les resultaba adaptarse a otros métodos alternativos como, por ejemplo, la copa menstrual.

A la brasileña

"Comparamos los productos del exterior para conocerlos más, pero observamos que las piezas eran más grandes, un corte con mucha más tela. La cintura era más baja y es que el cuerpo [de las extranjeras] también es distinto", recuerda Kist.
Es por esto que desde el principio tuvieron claro que harían un producto 100% brasileño, sea en la mano de obra o en la adaptación al clima."Toda la tecnología se desarrolló en Brasil. Para garantizar la procedencia y sostenibilidad del producto nos aseguramos de que los proveedores fueranlocales y cercanos, y así comprobar cuál era su calidad de vida", dijo la joven.
Por el momento, las tres estudiantes están trabajando en la logística, la administración y la comunicación de la marca pero piensan en aumentar el equipo pronto. Lo más inmediato es que en diciembre lanzarán una página web para vender los productos.

Feminismo y sostenibilidad

Para Justine Carta Hess, de la consultora Kantar Futures, un producto como la ropa interior menstrual es algo emblemático de las tendencias del siglo XXI: el feminismo y la sostenibilidad."El exceso de interacciones y todo lo que se comparte en las redes sociales, entre otras cosas, permiten también que se cambie ese tabú y la vergüenza a hablar el tema. Por otro lado, un proyecto de crowdfunding abre los mercados para este tipo de productos. Antes eran los hombres mayoritariamente quienes tenían la capacidad de armar un negocio", le señaló a BBC Brasil.
"Esta nueva generación que llamamos centennials, tiene mucho acceso a la información y consideran bastante el costo y la efectividad de los productos. Por eso además de los aspectos financieros y medioambientales de los productos tradicionales, las braguitas menstruales reutilizables tienen perspectivas de triunfar".
BBC