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Su rostro refleja dolor y confusión. Francisco Batista no recuerda qué sucedió la noche del lunes en la carretera Azua-Barahona, cuando una patana embestió el autobús que conducía y perdieron la vida nueve personas.
Batista, quien se encuentra ingresado en el hospital traumatológico Ney Arias Lora, dice desconocer qué pasá, ya que se dio cuenta del accidente cuando despertó en el centro de salud.
“Si yo le digo, le hablo mentira porque yo no lo vi, me vine a dar cuenta aquí de eso”, expresó.
Al igual que Batista, en el hospital se encuentra ingresada la joven de 21 años, María Eloísa Beltré Santana, quien viajaba con su hijo al momento del accidente y salió ileso porque ella lo protegió con su cuerpo.
La joven solo da muestras del dolor que siente por las heridas que sufrió en el impacto.
Ambos se encuentran en condiciones estables, según el director operativo del centro, Alfredo Polanco, quien dijo que serán sometidos a cirugías.
Batista sufrió una fractura de fémur izquierdo, pero se está estabilizando luego de llegar al hospital en franco choque hipovolémico, explicó el galeno.
Además, el conductor del autobús ha presentado insuficiencia renal aguda producto de la disminución de la volemia de la sangre.
En tanto que la joven Beltré tiene fractura de pelvis y será sometida a cirugía luego de que se le practique una tomografía de cráneo control y que el neurocirujano dé la autorización.
PUBLICADO POR
RICARDO PEREZ
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