Su nombre es Louis Corbett. Es un niño neozelandés de 12 años ,
que ha emprendido junto a sus padres una gran aventura, la de recorrer
el mundo. No se trata de un capricho atendido por unos padres
complacientes. La realidad es que Louis padece una retinosis pigmentaria que le está provocando una pérdida de visión que hará que dentro de no demasiado tiempo deje de ver completamente.
Antes de que eso suceda, sus padres han decidido hacer un viaje por sus rincones del mundo favoritos. Entre ellos el Gran Cañón, las Cataratas del Niágara, el Empire State y la sede de Google en
California. Además, el pequeño quiso incluir entre sus elecciones la de
presenciar un partido del equipo de baloncesto de los «Boston Celtics».
Un deseo que ya se ha hecho realidad. Además el encuentro del pequeño
con las estrellas del baloncesto ha sido distribuida a través de los
propios jugadores de los Boston Celtics a través de su cuenta de twitter.
La historia de Louis fue compartida por numerosos seguidores a través de las redes sociales y medios de comunicación hasta llegar a los oídos de Corinne Grousbeck, esposa del dueño de los Boston Celtics, que inmediatamente contactó con la familia para hacer realidad uno de los sueños del pequeño.
El niño y su padre han ya asistido, el 5 de marzo, al partido donde Rajon Rondo y compañía se enfrentaron a los Golden State Warriors. Bank of America puso a su disposición su palco de lujo, y Air New Zealand se hizo cargo del traslado.
Todos estos viajes son posibles también gracias a los familiares y a un empresario, dueño de una empresa de ordenadores, gracias al cual han conseguido recaudar 25.000 dólares en menos de un mes
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